Las primeras esculturas del Museo del Atlántico, que albergará un total de 400 del artista británico Jason DeCaires se han sumergido frente a la costa lanzaroteña de Playa Blanca, que contará con el primer centro museístico submarino de Europa.
Sus esculturas hechas de un hormigón con ph neutro se transforman en arrecifes coralinos por la acción de los microorganismos acuáticos, incrementando así la biomasa marina y facilitando la reproducción de las especies. Las esculturas se sumergerán a una profundidad no inferior a 12 metros ni superior a los 15, lo que permite que el museo sea visitable por buceadores de todos los niveles y que, incluso, sea visible en determinados días desde la superficie.
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